jueves, 18 de diciembre de 2014

UN MUNDIAL PEQUEÑO.

Ser el mejor del mundo en algo es hablar de cosas serias. ¿Estamos de acuerdo no? Pues este fin de semana se decide que club de fútbol es el mejor del mundo. Y el Real Madrid tiene todos los números de coronarse como campeón este año.
Se está disputando el llamado 'Mundialito' de clubs. Mundialito, le llaman. Así como pequeño. Que no tiene importancia. Oigan, pero antes habíamos quedado en que ser el mejor del mundo en algo son palabras mayores. Entonces, ¿dónde queda este Mundialito? El problema ya lo sabemos todos. El problema de que la importancia del Mundialito quede en una especie de limbo de la cual nadie sabe nada es por los equipos que participan. Sí, son los mejores de cada continente. Pero no les voy a descubrir las Américas si les digo que el nivel del 'mejor' de Ásia o África quedaría traducido a nivel medio/bajo si comparamos con los equipos del viejo continente. Las grandes ligas de Europa. No hay nada que discutir en ello. Esto es un hecho. Igual que es normal que a uno le apasione más una final de Champions League que la final del Mundialito contra San Lorenzo.
Por lo tanto... ¿Hay que restarle importancia? Pues para mi no. Y es que no porque te estás jugando ser EL MEJOR DEL MUNDO. Ala, con mayúsculas. Te juegas llevar en el pechito una insignia durante todo un año que te certifica como ello. Y eso es un orgullo. El orgullo de ser el mejor del mundo. Y personalmente, como seguidor del Barcelona, tengo que reconocer que ver la camiseta blaugrana con ese escudo dorado en el centro me la hacía ver mucho más bonita que cualquier otro modelo.
Para que entiendan la importancia del Mundialito, o la que yo le doy, no lo sé, les quiero explicar como viví las veces que el Barça llegó a la final de este trofeo. En 2006 cuando lo perdió, dolió. Recuerdo a Ronaldinho muy tocado, a punto de llorar. En 2009 simplemente sentí lo que era ver al mejor equipo del mundo. La imagen del final del post vale más que mil palabras. Y en 2011, la más reciente, recuerdo que fue una mañana de domingo con las mismas sensaciones que hacía 2 años. Golear a un endeble Santos no sabía igual que hacerlo a cualquier equipo en La Liga.
Cada año que empieza este torneo, deseo que hubiera algún equipo del que fuera seguidor. Digamos que el Mundialito, ese Mundial pequeño tiene algo de magia. Puede que a algunos les sepa a torneo de verano en la época del año equivocada, pero el Real Madrid este fin de semana tiene la posibilidad de coronarse como el mejor equipo del Mundo de 2014. Y eso son palabras mayores para que a todo esto le llamen 'Mundialito'.

Ser los mejores del Mundo son palabras mayores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario